Omega 3 es uno de los nutrientes clave para hacer una dieta saludable. Esta clase de lípidos tienen propiedades beneficiosas para el organismo. Su presencia habitual en los alimentos determina un buen estado de salud. Por eso, te vamos a contar cuáles son los alimentos que contienen omega 3 en mayor cantidad. De todos modos, antes de hablar en detalle sobre estos ácidos grasos, debemos mencionar la importancia de asegurar una buena proporción de lípidos en la dieta. Es importante priorizar la presencia de grasas mono y poliinsaturadas, pero no se deben excluir las grasas saturadas. Así mismo, estos también cumplen importantes funciones a nivel fisiológico. La importancia de los ácidos grasos omega 3 Los lípidos de la serie omega 3 se caracterizan principalmente por su potencial antiinflamatorio, tal y como destaca un estudio publicado en Inmunología Internacional . Por eso son determinantes para facilitar el manejo de patologías como la artritis, que cursan con inflamación como mecanismo subyacente destacado. Los ácidos grasos ayudan a mantener la homeostasis y el buen funcionamiento del organismo. Al mismo tiempo, se ha demostrado que los ácidos grasos omega 3 son capaces de ayudar a reducir la incidencia de enfermedades cardiovasculares. Así lo demuestra un estudio publicado en la revista La base de datos Cochrane de revisiones sistemáticas . En este sentido, los lípidos pueden actuar reduciendo el riesgo de desarrollar placas ateroscleróticas, lo que dificulta que el flujo sanguíneo llegue a los tejidos. Alimentos que contienen omega 3 A continuación, te describiremos los 3 alimentos que más omega 3 contienen. De esta forma, puedes incorporarlos a tu dieta habitual para beneficiarte de sus propiedades.1. Aceite de oliva El aceite de oliva está compuesto por grasa, en un porcentaje muy alto. Dentro de estos nutrientes, los ácidos grasos omega 3 destacan por encima del resto. Ahora bien, elegir un buen aceite de oliva es clave. Para ello lo más adecuado es recurrir a variedades vírgenes extra, ya que se obtienen del primer prensado de la aceituna. Cabe señalar que es importante que el aceite de oliva se consuma crudo. Cuando este alimento se somete a procesos térmicos agresivos, hay un cambio en la configuración espacial de sus moléculas, pasando de cis a trans. Estos últimos lípidos son capaces de ejercer efectos negativos sobre la salud.2. Nueces Además de su concentración de proteínas, las nueces son beneficiosas debido a la presencia de ácidos grasos insaturados en su interior. Entre ellos, hay que hacer una mención especial a los omega 3. Es por ello que se recomienda la presencia de frutos secos en la dieta habitual. Aprovechando su versatilidad a nivel culinario, Se pueden consumir solos, con lácteos, en batido Y ofrecen muchas posibilidades diferentes. Siempre son una buena opción como alimento para incluir en las meriendas. Eso sí, su presencia en la dieta debe ser moderada, ya que son altamente calóricos.3. Pescado azul El pescado azul es una fuente de ácidos grasos omega 3, proteínas y minerales y oligoelementos. Se recomiendan en el contexto de una dieta saludable. De hecho, una ingesta de más de dos raciones a la semana se asocia a un menor riesgo de accidente cardiovascular. El pescado es una rica fuente de omega 3. Además, contienen yodo en su composición, un mineral de vital importancia para la fisiología de la glándula tiroides, lo que también puede estar relacionado de alguna manera con la inflamación y la eficiencia metabólica. Sin embargo, es recomendable elegir aquellos pequeños pescados azules. Los grandes, cuando están salvajes, pueden contener cantidades significativas de metales pesados en su interior. Es importante incluir alimentos que contengan omega 3 en la dieta. Los ácidos grasos omega 3 son de vital importancia para garantizar que la inflamación se mantenga bajo control, lo que ayuda a crear una buena salud. Por ello, es importante conocer qué alimentos contienen omega 3 en su composición, para hacer hincapié en su consumo. También hay que tener en cuenta que existen otros lípidos, los omega 6, que tienen el efecto antagónico. Lo óptimo es ingerir ambos ácidos grasos en proporción 1:1, para mantener internamente la homeostasis. Aun así, en la dieta actual de los países desarrollados es inusual encontrar esta relación de niveles, ya que se suele consumir una mayor cantidad de lípidos omega 6. Te puede interesar…
Una de las principales características de los ácidos grasos omega 3 es su capacidad para controlar internamente la inflamación, lo que resulta útil en la prevención de patologías crónicas.