Con la primera ola de calor, que se adelanta al propio verano con temperaturas superiores a los 35 grados, los expertos recomiendan evitar ciertas actividades, hidratarse (entre 2 y 2,5 litros de agua al día) a pequeños sorbos y sin esperar a tener sed y, sobre todo , reconociendo los síntomas del golpe de calor para actuar a tiempo, especialmente con personas vulnerables.
Una turista se protege de las altas temperaturas con un sombrero y un abanico mientras pasea por la judería de Córdoba. EFE/Salas
En general, los síntomas del golpe de calor son variados pero ocurren en diferentes niveles. Y se generan por un aumento de la temperatura corporal derivado de la exposición prolongada al sol, las altas temperaturas, la falta de hidratación o el esfuerzo físico prolongado.
En estas situaciones, el organismo sufre importantes pérdidas de agua y tiene dificultades para regular su temperatura a través de los mecanismos habituales como la sudoración, produciéndose, como consecuencia, un aumento de la temperatura corporal, explican los expertos del Instituto de Investigaciones Agua y Salud.
Cuando el cuerpo alcanza una temperatura superior a los 40 °C (durante períodos de 10 o 15 minutos), estos mecanismos reguladores del calor se ven superados y entran en estado de shock, produciéndose así el temido golpe de calor.
Tres niveles de síntomas de golpe de calor
Los síntomas del golpe de calor pueden presentarse en el momento o después de varios días de exposición al riesgo y se dividen en tres niveles según su gravedad:
- Primer nivel: Son los primeros signos de alarma de un golpe de calor, y pueden suponer una pérdida de agua de entre el 1 y el 5% del peso corporal.
- Piel enrojecida, caliente y seca.
- Sed intensa y boca seca.
- Sudoración excesiva.
- Sensación de calor sofocante.
- Temperatura superior a 40 ºC.
- Segundo nivel: En este caso, el cuerpo ha perdido entre un 6 y un 8% del peso corporal.
- Debilidad muscular y calambres.
- Dolor de cabeza y mareos.
- Escasez de orina.
- Anhidrosis (ausencia de sudor). Pulso fuerte y acelerado.
- Dolor de estómago y falta de apetito.
- Tercer nivel: el cuerpo ha perdido entre el 9 y el 11% del peso corporal.
- hiperventilación
- Agotamiento.
- Náuseas o vómitos.
- Estado de confusión y desorientación.
- Pérdida del conocimiento, delirio o convulsiones.
- Desmayo o incluso coma.
El Instituto de Investigaciones Agua y Salud (IIAS) es una entidad científica y divulgativa, cuyo objeto es desarrollar actividades encaminadas a la investigación y divulgación de las características de las aguas minerales, aportando la documentación pertinente basada en estudios e informes sobre este producto. naturaleza y su importancia para la salud.